3 tratamientos Para Combatir La Adiposidad Localizada
La adiposidad localizada es un problema estético de fácil resolución
La adiposidad localizada se clasifica en dos tipos:
ADIPOSIDAD LOCALIZADA PRIMARIA
Este tipo de grasa suele afectar la forma de la silueta corporal mayoritariamente en la región media e inferior de los muslos. Está directamente relacionada con el desarrollo hormonal.
ADIPOSIDAD LOCALIZADA SECUNDARIA
Este tipo de grasa se presenta mayoritariamente en el abdomen, los costados del torso, la papada y los brazos. Acostumbra a estar ligada a los malos hábitos alimenticios y la falta de ejercicio.
Cabe destacar que para tratar este problema estético, siempre tienes que elaborar un plan de trabajo combinado con diversas técnicas tanto de aparatología como manuales, más recomendaciones nutricionales y de actividad física a tu paciente.
Es por esto que para erradicar la adiposidad localizada existen muchas técnicas sumamente efectivas, pero en este artículo vamos a ver 3 de los tratamientos más solicitados del momento:
1 – Ondas De Choque
Las ondas de choque radiales son generadas por impulsos electromagnéticos superficiales y penetran en el tejido de 3 a 3,5 cm, donde se propagan de forma divergente y pierden energía conforme avanzan.
Tienen la ventaja de abarcar superficies muy amplias, son empleadas con frecuencia en tratamientos estéticos de remodelación corporal ya que provocan efectos biológicos, físicos, químicos y celulares en el tejido, estimulan la formación de nuevo colágeno, potencian la lipolisis, combaten la flacidez y ayudan en la reparación tisular.
Cuando se las emplea posteriormente a sesiones de criolipólisis, ultracavitación o Lipoláser, potencian el efecto de los mismos, incrementando la reducción de la adiposidad, tensando la piel y moldeando el contorno.
2 – Criolipólisis
Excelente técnica no invasiva para acabar con la adiposidad localizada de forma efectiva.
La Criolipólisis es sumamente efectiva en abdomen alto y bajo, flancos, y glúteos. Mediante la aplicación de frio intenso y controlado (temperaturas entre 5 y -9 grados), se consigue la muerte celular programada de los adipocitos al congelarlos y cristalizarlos, sin causar lesiones al tejido adyacente.
Las sesiones durante un lapso de 30 minutos a 60 minutos y se requieren de dos o tres aplicaciones por zona para conseguir los resultados esperados, que comienzan a verse pasados unos tres meses del tratamiento, que es cuando los adipocitos lesionados comienzan a morir.
Algunos equipos cuentan con crioterapia y tecnología de Ultracavitación, ofreciendo así resultados mucho más rápidos ya que las células lesionadas por el frio se disuelven al instante con Ultracavitación.
3 – Ultracavitación
Es una de las tecnologías más empleadas en la reducción de medidas. Hace uso de ultrasonidos de alta potencia para acabar con las lipodistrofias de forma rápida y notable desde la primera sesión.
La Ultracavitación emite ondas ultrasónicas que al chocar contra el panículo adiposo e ingresar a un medio líquido, crean microburbujas debido a las diferencias de presión positiva y negativa.
Como consecuencia de la presión y de la energía térmica intratisular, se lesiona la membrana de los adipocitos y se filtra su contenido graso al medio, el que después es excretado por heces y orina.
Está indicada para casos en donde el panículo adiposo es de 3 a 4 cm, de lo contrario se debe emplear ultrasonido convencional u otra técnica reductora.
Desde la primera sesión es posible ver las diferencias, y la cantidad de aplicaciones depende del grosor del panículo adiposo a tratar como también de la paciente.
Es crucial que la paciente evite las grasas los días previos y posteriores al tratamiento, beba abundante líquido y haga actividad física al salir del gabinete.
Estas son solo algunas de las alternativas con las que contamos las especialistas actualmente, pero la lista es aún más extensa.