Protonterapia, Terapia con protones en tumores pediátricos, tumores de la base de cráneo, cerebrales, de cabeza y cuello
La técnica de radioterapia con protones ataca solamente a los tejidos que están enfermos y es uno de los proyectos más avanzados en Europa en el tratamiento contra el cáncer. Considerando todas las indicaciones, la protonterapia está indicada para más del 15 % de los pacientes de radioterapia. De acuerdo con los resultados presentados por estudios científicos internacionales, la terapia de protones es la más adecuada para los tumores en niños y adolescentes (La protonterapia es considerada el tratamiento más adecuado para los pacientes menores de edad), el cordoma, el condrosarcoma, los melanomas intraoculares.
La radioterapia de protones es el tratamiento de elección en muchos tipos de cáncer, ya que su eficacia es igual o superior a la radioterapia convencional y conlleva menos efectos secundarios. Sus beneficios son numerosos:
.- Se produce una mínima o nula radiación en los alrededores del tumor
.- La dosis total de radiación por tratamiento es menor,
.- No causa tumores secundarios a la radiación y la calidad de vida del paciente es mucho mejor.
Cual es la Diferencia entre Radioterapia convencional y la Terapia con protones?
.- Radioterapia convencional, los haces de rayos X atraviesan tanto tejidos sanos como cancerosos, destruyendo todo lo que se encuentre en la trayectoria del haz. Los tejidos cancerosos resultan dañados, pero también el tejido sano que los rodea. En consecuencia, los médicos intenta limitar las dosis de radiación tradicional a fin de reducir al mínimo los efectos perjudiciales para los tejidos normales próximos al tumor.
Versus
.- Terapia de protones, utiliza haces de protones para apuntar con precisión a los tumores cancerosos y eliminarlos, incluidos los tumores difíciles de alcanzar por estar cerca o dentro de áreas vitales, o alojados en zonas sensibles del cuerpo. Los protones altamente cargados ingresan al cuerpo con una baja dosis de radiación, se detienen en el sitio del tumor, se ajustan —o se “adaptan”— a la forma y al volumen o a la profundidad del tumor, y depositan la mayor parte de su energía para combatir el cáncer directamente en el tumor.
Conclusión:
La terapia de protones permite aplicar poderosas dosis de radiación directamente en el tumor, con poco daño para el tejido sano circundante. Esto es especialmente importante cuando se tratan áreas cercanas a órganos vitales, como los pulmones, o tumores cercanos al ojo, el cerebro o el esófago, y también cuando se tratan cánceres en niños, cuyos cuerpos aún están creciendo y desarrollándose.
A día de hoy, más de 130.000 pacientes han recibido tratamiento de protonterapia en los 58 centros existentes por todo el mundo. Se prevé que en 2020 habrá 125; más del doble.
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