Cuidar tu rostro por la noche, Aprende paso a paso la mejor forma de cuidar tu rostro por la noche
La piel trabaja de noche. Sus células están concentradas en el proceso de reparación/regeneración y debemos aprovechar la situación y ayudarlas con los activos adecuados. Pero para que estos activos sean efectivos necesitamos que la piel esté perfectamente receptiva. Es por esto que una buena rutina antes de acostarse es fundamental si queremos que las cremas funcionen.
Para empezar, se recomienda siempre limpiar el rostro y desmaquillarse completamente, «esto permite retirar de la piel los restos de maquillaje, polución…que se acumulan a lo largo del día y dejar que los productos aplicados a continuación penetren correctamente en la capas donde deben de actuar». Es básico utilizar un limpiador para la piel, buscando el más adecuado para tu tipo de cutis (jabonosos, crema, aguas micelares…). «Lo importante es que sea un limpiador que retire de nuestra piel eficazmente pero sin agredir, la suciedad, polución y grasa, que se acumulan a lo largo del día». Hoy día, además, existe una corriente procedente de Corea, donde los limpiadores tienen también propiedades reparadoras y tratantes, con ingredientes hidratantes y antioxidantes. Para la zona del contorno de los ojos debe utilizarse un desmaquillante suave indicado para limpiar y proteger la delicada piel de esta zona.
Una vez la piel ha quedado inmaculada, está preparada para absorber los componentes activos del producto para el tratamiento de noche. Es hora de echar mano a los sueros y las cremas de noche. «Es ideal utilizar los activos que promueven la recarga de energía de las células y estimulan la producción de proteínas«.
¿Cómo elegir los productos?
A la hora de escoger sugierimos fijarnos en los principios activos que contienen. «Destacaríamos todos aquellos que son capaces de ayudar a nuestra piel a realizar de forma más eficaz los procesos de regeneración celular y auto-reparación. También, los que ayuden a que nuestra piel baje los niveles de cortisol -‘hormona del estrés”’ y suban los niveles de la melatonina -‘hormona del sueño’-, ya que con la edad disminuyen los niveles de melatonina». Por otro lado, es necesario ayudar a revivir nuestra piel aportando elementos que aporten regeneración y nutrición.
Un punto muy importante, es que «durante la noche es cuando mayor agua trans-epidermal pierde nuestra piel debido al alto ritmo metabólico nocturno, así pues los productos nocturnos deben de aportar agua para reponer estas pérdidas».
Una vez por semana, recomiendamos realizar un proceso de limpieza facial extra: «Se humedece el rostro o incluso aprovecha un baño nocturno relajante, para colocarse una mascarilla purificadora con ácido salicílico. Se retira y se limpia con un cepillo de ultrasonidos. Se mira en un espejo de siete aumentos para buscar los granitos blancos o negros y sacarlos antes de que se enquisten. Como después de tanta limpieza la piel queda un poco desprotegida, usa un sérum más graso de lo habitual».