Dieta paleolítica
La Dieta Paleolítica fue descubierta por el Dr. Loren Cordain, la cual describe en su libro La Paleodieta.
Esta dieta consiste en optar por alimentos con efecto No adictivo, simulando la alimentación que llevaban nuestros ancestros en la era Paleolítica, con el objeto de comer más sano, reducir el peso corporal y como tratamiento de enfermedades cardiovasculares y metabólicas…
Existen alimentos que crean deuda de hambre, son aquellos que una vez que los ingerimos (aunque sea en una porción pequeña) no podemos parar de comerlos.
Son los alimentos que producen más hambre
en vez de saciarla y finalmente llevan a aumentar de peso (engordar).
Varios estudios han demostrado que existen circuitos nerviosos que son activados por ciertos alimentos que se vinculan con el placer.
Por ejemplo: patatas fritas, galletitas, pan.
¿Nuestros requerimientos son los mismos que la del homo antiguo de la Edad de Piedra?
Las necesidades nutricionales se han formateado hace millones de años atrás y son idénticas al del hombre de la Edad de Piedra. Por ello, pretender comer diferente a lo que nuestros genes necesitan nos lleva a engordar y a las enfermedades modernas tan comunes como la diabetes, hipertensión, trigliceridemia, colesterolemia, gota, e incluso a algunos tipos de cánceres.
Estos alimentos que se vinculan con el placer los llamamos Neoalimentos.
¿Qué son los Neoalimentos?
Los neoalimentos (nuevos alimentos, alimentos procesados) son aquellos que concentran la mayor cantidad de almidones, aceites y azúcares refinados, son los más tentadores a la hora de las predilecciones y son tentadores porque activan estos circuitos cerebrales que dan una sensación Momentánea de bienestar.
Nuestros antepasados paleolíticos eran delgados, atléticos y libres de enfermedades cardíacas, diabetes y otras enfermedades tan comunes en nuestro tiempo.
¿Cómo perjudican estos Neoalimentos adictivos?
En realidad todos los alimentos son
en alguna medida adictivos, pero hay unos que generan más adicción que otros. No conozco paciente que me diga que come peras y no puede parar de comer, o la lechuga. Pero la gran mayoría dice que cuando está frente al chocolate, a la pizza, las galletitas no paran hasta que se lo terminan de ingerir. Y lo peor es que la persona manifiesta “hambre” en pocas horas nuevamente, ¿significa esto que las calorías que se consumió no sirvieron para dar saciedad?
En realidad Las calorías no satisfacen ni estimulan el sistema adictivo, son los alimentos y sus sustancias químicas lo que lo hacen.
Estos alimentos perjudican si la ingesta es excesiva. Si la ingesta supera al gasto de energía de la persona, que sería lo que llamamos los nutricionistas la “sobre-alimentación”.
La sobre-alimentación es un mecanismo protector del ser humano cuando la oferta de alimentos es esporádica o impredecible (como era la situación que vivía el homo antiguo, éste encontraba un mamut o un espacio con árboles y frutas y comía lo más que podía para aguantar el ayuno que le esperaba hasta encontrar otra fuente de alimento).
Hoy no estamos expuestos a ésta situación de carencia sino al de sobre-alimentarnos un día y al día siguiente nuevamente porque no vienen períodos de escasez. Esta sobre-alimentación sostenida lleva indefectiblemente al sobrepeso.
Las calorías no satisfacen ni estimulan el sistema adictivo, son los alimentos y sus sustancias químicas las que lo hacen.
Ejemplo de esto es que un plato de churrasco vacuno con verduras cocidas que pueden proporcionar 500 calorías y una hamburguesa con una gaseosa que proporcione las mismas calorías, las primeras tendrán efecto saciante mucho mayor que la hamburguesa que hará estimular circuitos cerebrales de recompensa.
La dieta paleolítica es una propuesta alimentaria para la población en general, y
dirigida con adecuaciones del nutricionista pueden llevar al adelgazamiento sano y a la corrección de enfermedades modernas como la obesidad, diabetes, colesterol, hipertensión.
Diferencia entre alimentación del Paleolítico y alimentación actual:
La famosa Pirámide de los alimentos sugiere consumir como base de la alimentación carbohidratos.
Hace años nos impusieron una pirámide que contiene como base el arroz, los panes, la pasta (macarrones, fideos, espaguetis,…. otros), y así nos va.
Habría que replantearse otras estrategias más valedoras cuando recomendamos una dieta a una población.
La población en general entendió el sistema de la pirámide y se ha acostumbrado a la ingesta de muchos carbohidratos, a partir de ahí el número de personas con enfermedades relacionadas con la alimentación aumentaron enormemente.
Nuestros genes están acostumbrados a una alimentación alta en carbohidratos pero provenientes de frutas, verduras y legumbres que contienen un alto porcentaje de fibra no absorbible que cumplen una función importante en el organismo especialmente para el buen funcionar de los intestinos.
Hoy los carbohidratos que ingerimos provienen de azúcares encontrados en las gaseosas, zumos azucarados, masas, tortas, pastas, arroz, panificados.
Estos carbohidratos pasan muy rápido a la sangre y terminan llevando al sobrepeso y en muchas ocasiones a la obesidad.
Si hablamos de necesidades, nuestro organismo puede vivir perfectamente sin los alimentos adictivos, pues no proporcionan nutrientes esenciales.
A diferencia de las carnes, frutas, verduras, lácteos que nos ofrecen proteínas, carbohidratos, grasas naturales, vitaminas, minerales, fibra y agua.
Durante mucho tiempo se les hechó la culpa a las grasas de ser las causantes de las enfermedades coronarias, cerebrovasculares, hipertensión, pero hoy se sabe que nadie come grasas solas. Éstas están vehiculizadas por un ingrediente moderno que es la harina. De allí salen preparaciones como: empanadas (masa con harina, carnes grasas, frituras), hamburguesas al pan (pan hecho con harina y aceites, hamburguesas con carnes grasas, frituras), pizza (masa con queso, jamón, salsa frita de tomate) y así podríamos dar muchos ejemplos.
Las carbograsas que son las grasas unidas a los carbohidratos son los causantes casi directos de los excesos en la alimentación por su alto poder adictivo, por proporcionar placer inmediato.
Esa sensación de bienestar que dura solo pocos minutos.
¿Es bueno comer en horarios determinados?
Hay que reconocer que comer a horarios, desayuno, almuerzo, merienda, cena es una cuestión de la modernidad. No está biológicamente comprobado que tengamos que comer en esos horarios. Deberíamos comer cuando tengamos hambre pero ser selectivos en la elección de lo que se va a comer.
Socialmente está bien visto el comer a horarios específicos, y se puede organizar y planificar la alimentación según los horarios de cada persona en particular.
Se sabe cuál era la esperanza de vida? Estoy totalmente en contra de «los neoalimentos del hombre actual». Pero la carne y pescado que se come hoy en día no son muy sanos, a mi parecer. yo soy vegana.
Con la dieta del Paleolitico, no solo se aumenta la esperanza de vida, si no que sobre todo se aumenta la calidad de la misma.
En realidad es una dieta que consiste en evitar los Neoalimentos y por supuesto la ingesta excesiva de alimentos.
Si revisa el articulo podrá comprobar que patologías como el colesterol, la hipertensión, … otras. Están íntimamente relacionadas con la alimentación.
Un saludo