Algunos  Tratamiento  con   Láser

Existen diferentes tipos de lesiones vasculares tratables mediante laser:

–          venas pequeñas en cara y piernas (telangietesias),

–          venas medianas (venalectasias) en miembros inferiores  

–          hemangiomas,

–          rosacea

–          manchas vino tinto,

–          nevus de rubí, etc.

Debido al tamaño de los vasos, su color y configuración, no es posible tratar todas las venas y patologías vasculares con un solo láser, se requiere de varios tipos de láser.

¿Como Actúa el Láser?

El láser produce un rayo de luz fuertemente concentrado; la luz de color verde producida por el láser es la clave para el efecto sobre la lesión venosa. El color rojo de la sangre que se encuentra en los vasos sanguíneos absorbe la luz verde. El láser sella la vena y la cierra y el vaso es absorbido por el organismo, desapareciendo.

El tratamiento con láser para las telangiectasias en cara depende de la cantidad, el tamaño y la profundidad de las venas. La mayor parte de los pacientes requieren aproximadamente de 1 a 2 sesiones.

Las sesiones se realizan  espaciándolas   entre si de  6 a 8 semanas.

El láser no es doloroso, la sensación durante la sesión es sentir  como pequeños golpecitos. La mayoría de los pacientes no requieren anestesia. En caso de necesitarlo se aplicara  anestesia tópica o local en la zona de tratamiento.

Al finalizar el tratamiento  la apariencia del área tratada varía de unas personas a  otras, dependiendo de lo intenso del tratamiento. Esto incluye: enrojecimiento, pequeñas costras o ligero dolor que desaparecen con el tiempo.

Las venas  que pueden tratarse con láser son las siguientes:

Telangiectasias: Son venitas pequeñas de color rojo claro o morado, planas de 0.1 mm de diámetro.

Venas Reticulares – Venulectasias: De color azul oscuro o verde, generalmente de 2 a 3 mm de diámetro.

Hemangiomas y Manchas Vino Tinto.

Tratamiento de cicatrices mediante láser

Cicatriz es la señal que queda en los tejidos orgánicos de la piel después de curada una herida o llaga.

Esta señal puede ser temporal o permanente en el tiempo, resultando más o menos antiestética en función de la forma, tamaño y ubicación de la misma.

Afortunadamente, en la actualidad disponemos de tecnologías eficaces y efectivas para eliminar las cicatrices, así encontramos soluciones tecnológicas de cómo la terapia fotodinámica o el láser.

Ambas proporcionan unos resultados contrastados para la eliminación de cicatrices mediante la regeneración del colágeno.

Los motivos de su aparición puede deberse a causas fortuitas o accidentales o como consecuencia de diversas patologías.

El láser  constituye una revolucionaria novedad en remodelación cutánea, ya que con una técnica no agresiva permite eliminar el colágeno deteriorado de nuestra piel y estimular la formación de colágeno nuevo.

Permite el tratamiento de cicatrices de acné de forma eficaz y segura. Para obtener resultados óptimos suelen ser necesarias 4-5 sesiones, realizadas con un intervalo aproximado de 15 días.

Los resultados de esta técnica se empiezan a observar a partir del primer tratamiento. Sucesivos tratamientos incrementan de forma exponencial la mejoría del problema a tratar.

El grado de satisfacción de los pacientes es muy alto, ya que además de mejorar un problema en concreto como las cicatrices, la formación de colágeno nuevo que induce el láser origina una piel de mejor calidad y con menos imperfecciones.

Terapia foto-dinámica: Esta forma de tratamiento consigue la destrucción selectiva de las células alteradas, respetando el tejido sano, con buenos resultados cosméticos y funcionales.

El tratamiento consiste en la aplicación sobre la cicatriz a tratar, de una crema que contiene una sustancia fotosensibilizante, seguida de la irradiación de la zona con una luz especial, a las 3 horas de la aplicación de la crema. Tras el tratamiento el paciente realiza una vida totalmente normal.

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