Mascaras LED, eficacia Antiarrugas
Una tecnología que desarrolló la NASA, con el objetivo de potenciar el crecimiento de las plantas en el espacio activando la fotosíntesis con la ayuda de la luz LED, es la clave de la nueva terapia fotodinámica que se utiliza en numerosos centros de Medicina Estética.
La fototerapia es una terapia basada en el uso de la luz para tratar diversas condiciones que afectan la piel. La luz aplicada puede ser radiación visible, infrarrojos o ultravioleta. La Terapia Fotodinámica que desarrolla la luz LED (diodo emisor de luz) utiliza longitudes de onda específicas de baja intensidad para estimular los tejidos.
Su eficacia frente a las arrugas:
En un estudio realizado por el doctor Bitter se demostró que más del 90% de los pacientes analizados presentaba una mejora del 75% en sus síntomas de la rosácea (eritemas), pero además, el 84% notaba una reducción en sus arrugas, el 78% tuvo importantes modificaciones en su pigmento facial y el 49% observó cambios en el tamaño de sus poros.
Dependiendo de los resultados que se busquen y el diagnóstico facial previo, se aplica un tipo de luz diferente.
La luz LED roja, está indicada para la reparación de los tejidos dañados, la reducción de arrugas, líneas de expresión, rojeces y capilares dilatados, manchas y ojeras. En efecto, la luz penetra en las capas más superficiales y estimula la producción de colágeno y elastina, que dan a la piel un aspecto más liso.
La NASA ha concluido que la luz LED roja mejora el crecimiento de las células, aumenta la actividad fibroblástica, refuerza la síntesis del ADN y acelera la cicatrización de heridas significantemente. Ideal para su aplicación en pieles sensibles por su capacidad de activar la regeneración celular y fortalecer de este modo la barrera protectora natural de la piel.
La luz LED azul, este tipo de luz está indicada para pieles con tendencia acneica, ya que actúa penetrando en los poros y eliminando las bacterias. Del mismo modo, se consigue reducir la dilatación de los poros. Tiene un efecto anti bactericida, desinfecta, cura, calma y suaviza la piel. La Academia Americana de Dermatología informó de que la luz azul puede ser utilizada con éxito para destruir la bacteria que produce la inflamación asociada al acné. Además, tiene una acción constrictiva de las paredes capilares que reduce el enrojecimiento, proporciona un efecto calmante, disminuye la irritación.
La luz LED verde para finalizar, si tu problema son las marcas, manchas en la piel, las toxinas y bacterias, además necesitas mejorar las defensas epidérmicas. La luz LED es la idónea.