PROCESOS INFLAMATORIOS
Los procesos inflamatorios, al igual que las indicaciones que hemos desglosado anteriormente, son condiciones de aparición diaria. En el caso de la medicina estética existen gran cantidad de procedimientos que generan procesos inflamatorios (Microdermoabrasión, peeling, uso de retinoides tópicos, procedimientos con laser ablativos y no ablativos, procedimientos quirúrgicos, procedimientos mínimamente invasivos, entre otros).
Como ha sido señalado en secciones anteriores de este artículo, la luz es capaz de producir efectos inhibitorios sobre los linfocitos y macrófagos, de utilidad en procesos inflamatorios agudos para inhibir la cascada inflamatoria.
En los estudios realizados con
relación al acné, se encontraron mejores resultados al combinar propiedades bactericidas y antiinflamatorias de la luz.
Se han realizado además estudios que evalúan el proceso inflamatorio producido por la realización de ciertos procedimientos estéticos.
Algunos tratamientos estéticos como el dye laser pulsado, laser infrarrojo, radiofrecuencia y láser ablativos producen reacciones inflamatorias que se manifiestan como eritema e hipersensibilidad de la piel tratada. Estos efectos son
de gran disconfort para el paciente, y su duración puede variar desde semanas hasta varios meses. En un estudio, se expone la experiencia de 2 años de realización de tratamientos usando luz a 590nm (amarilla). Se comprobó que el componente antiinflamatorio de la luz ofrece mejores resultados y produce resolución acelerada de los procesos inflamatorios. En otros estudios, la utilización de la luz azul (405‐420nm) combinada con la cercana al infrarrojo (850‐890nm) después de tratamientos de“resurfacing” con láser, evidenció una reducción del 90% del eritema posterior al tratamiento, además reportan aceleración sustancial de la curación de heridas postquirúrgicas. Se obtuvieron resultados similares en la disminución del eritema posterior al uso de luz intensa pulsada para el fotoenvejecimiento.
Una vez más se obtienen resultados favorables utilizando distintas longitudes de onda, lo que obliga a los investigadores a realizar estudios comparativos que demuestren cuál es la longitud de onda que produce mejores resultados. Por otra parte, la evidencia clínica del poder antiinflamatorio de la energía lumínica abre un gran numero de posibilidades de aplicación, aquí han sido contempladas aquellas que tienen que ver con procedimientos estéticos, pero así mismo puede ser utilizado en cualquier proceso inflamatorio agudo donde sea requerido.